"El crecimiento (0,8%) ha sido determinado, en modo principal, por el aumento del volumen de actividad y, en consecuencia, de los valores brutos añadidos de las actividades profesionales, científicas y técnicas, las actividades de servicios administrativos y servicios de soporte (+3,2%), construcción (+3,1%), actividades relacionadas con el espectaculo, culturales y recreativas; reparaciones de productos de uso habitual y otros servicios (+2,7%) e informática y comunicaciones (+1,7%)", se señala en un informe del INS.
El consumo ha aumentado igualmente con un 0,7% en el primer semenstre 2012, en especial por el crecimiento del 1,1% de los gastos de mantenimiento de las viviendas y de la población (energia, alimentación, etc...).
Las cifras, tanto en lo referente al crecimiento del PIB como al del consumo, no son espectaculares, pero han dado un respiro a las aturidades políticas y a los inversores, a la vez que un soplo de esperanza de una cercana recuperación sostenida de la economía.
Las cifras, tanto en lo referente al crecimiento del PIB como al del consumo, no son espectaculares, pero han dado un respiro a las aturidades políticas y a los inversores, a la vez que un soplo de esperanza de una cercana recuperación sostenida de la economía.
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